ENRIQUE RUANO

Hoy en la Complutense de Madrid había un acto en conmemoración del asesinato de este estudiante que como otros optó por revelarse contra la dictadura.

Un 18 de enero de 1969 fue detenido por la Brigada político-social por sus actividades subversivas en contra de la dictadura franquista.

Después de 3 días de "detención" le llevaron a practicar el registro de su casa, según la policía en su persecución se tiró por un patio interior, es decir se suicidó. El régimen, a través de la prensa afín, auspiciado por Manuel Fraga, distribuyó unas notas que probaban el suicidio. El informe forense encontró una herida en la clavícula, producida al parecer por el impacto de un clavo al caer. Se desechó la tesis de que fuese a causa del impacto de una bala, pero es que ni siquiera se hicieron pruebas a las armas de los policías.

Los estudiantes salieron en masa a las calles y se declaró el estado de excepción, bueno todavía mucho más excepcional de lo que ya lo era.

La familia de Enrique Ruano consiguió reabrir el caso ante el Tribunal Supremo en los años 90 y de la exhumación del cadáver resultó que faltaba un hueso, lo habían serrado. Por supuesto nunca apareció.

Los policías fueron absueltos por falta de pruebas, con el voto particular de una de las magistradas, que si consideró que se había cometido un asesinato.

Hay muchos casos como este a los que se echó tierra y los culpables de tantas injusticias se fueron de rositas en el nombre de la sacrosanta transición, parece que esta tarde habrá sonado aquella canción de Mª del Mar Bonet: "Que volen aquesta gent que trunquen de matinada" y que refleja una triste realidad de aquellos años.

Es necesario recordar, aunque sea doloroso, pq gracias a este hombre y a muchos otros hombres y mujeres podemos hoy ejercer nuestros derechos y libertades, al menos en este espacio y lugar en concreto. No debemos olvidar que en muchos otros lugares y momentos siguen sin respetarse los más mínimos derechos naturales de cada persona.