LA MUJER DEL JUEZ

Estos días he leído el polémico libro "La soledad del juzgador", de Elisa Beni, la mujer del Juez Gomez Bermudez.

Ante todo empezaría no recomendando su lectura y mucho menos su compra, menuda desilusión, yo que lo compré al hilo de los comentarios que prometían iba a enterarme de nosecuantasdeliberacionesreservadas. Está claro, era puro marketing.

La autora, no creo que sea demasiado conocida y a pesar de poner la foto de su ilustre cónyuge en la portada, el libro desde luego cuando ha empezado a tener tirón es desde que "se convirtió" o "lo convirtieron" en polémico.

La verdad es que en ocasiones he sentido vergüenza ajena, está claro que existe el amor y la admiración entre los dos, pero mejor hubiese quedado en la esfera privada. Esta muy bien que sienta admiración por su pareja pero es que llega a compararlo en algunos pasajes del libro además de con Yul Briner cuyo parecido es constatable de forma objetiva, con Fernando Alonso, con Miguel Indurain, en sus tiempos de "machote del norte" épico escalador de puertos rompepiernas y lo mejor con Santo Tomás.

La calidad literaria, en mi modesta opinión, deja mucho que desear y resulta bastante pedante que repita tantas veces la expresión "... en roman paladino" y otros latinajos judiciales que ya casi no se usan ni en el Tribunal Supremo.

A todos nos parece que "el Juez" como lo llama todo el tiempo en el libro es un gran profesional, que nos ha dado una lección de imparcialidad, sólo hay que ver que le han llovido críticas y ataques desde la izquierda y desde la derecha, ejemplo de eficacia y a la vez de sensibilidad. Sin embargo su mujer debería haberle hecho el favor de dejarle tranquilito y no publicar un libro o al menos no un libro en el que lo adula de esa manera y a la vez deja con el culo al aire a otros profesionales de la misma carrera, que como "su" Juez también deben tener independencia.

Por otra parte el quedarse calladita y llevar el no pretendido éxito con humildad no haría sino contribuir a la buena imagen de la justicia, que buena falta nos hace, porque no olvidemos que Javier Gomez Bermudez, eligió ser Juez, cobra por ello y es su obligación hacer bien su trabajo.

Bravo por él, debemos felicitarnos por tener un servidor público que es capaz de hacer un trabajo excelente en un juicio tan complicado. Y si alguna vez en este mundo judicial tan pequeño, tengo la suerte de trabajar con él, me sentiré orgullosa de llamarle Su Señoría Ilustrísima, porque éste si se lo merece, aunque ya es hora de que las mujeres brillemos por nosotras mismas y no a la sombra de nuestras parejas. Ese tipo de mujer... me parece... no se quedó en los setenta? Esperemos que las parejas de los Garzones, Del Olmo, Marlaska, etc..., no se animen a contar también su experiencia.

A otra cosa mariposa, aunque no me gusta nada la navidad y todo lo que sigue, puaj! este año lo he pasado muy bien y hasta he sido más feliz que el resto de los años.... los que me conocen ya saben por qué, así que a ver si nos dura esta buena racha y FELIZ AÑO 2008 a todos, todos.

Abrazos virtuales y muchas, muchas besonrisas.