Y QUE VIVA EL ARTE!!!

Este verano se puede ver en Zaragoza la exposición LIF, siglas que corresponden a Libertad, Igualdad y Fraternidad, con motivo del bicentenario en 2008 de la Guerra de la Independencia.

Nunca entendí muy bien la defensa exacerbada de los Sitios de Zaragoza y ese afán por seguir recordándolo, si resulta que los franceses nos llevaban unos cuantos valores de adelanto y podía haber sido el principio del final de nuestro atraso y la apertura a la modernidad.

Sin embargo es mejor que deje las cuestiones históricas, pq además de ser complejas, no acabo de dominarlas del todo.

Bueno, fui a ver la exposición y encontré un video que me encantó de Cristina Lucas, en el que mujeres de variadas edades increpaban, insultaban y hasta le daban bolsazos a un busto del famosísimo Rousseau pq en sus discursos mucho contrato social pero la igualdad la tenía más bien olvidada y soltaba cada perla...

Muy buenos los comentarios y muy divertidas las situaciones.

Buscando más sobre la autora en el este para mi, el invento definitivo, que es internet, me he encontrado con una artista que investiga sobre los valores sociales, de forma muy fresca, tal y como están en la calle. A partir de ahora la seguiré.

En la misma exposición, Francis Naranjo entrevista a un albino que cuenta lo que supone para él sentirse absolutamente diferente a los demás pq no puede ser, como dice, "amigo" del sol, y la tortura que le supone algo tan básico como la luz.

Por último tb me gustaron las agujas esparcidas al azar, aunque no recuerdo cual era el nombre de la artista.

Hay algunos cuadros interesantes y muy vanguardistas.

En fin, que sin ser una exposición impactante, me gustó, sobre todo que partiendo de algo tan aburrido como los sitios y con lo que nos han dado el tostón durante dos años, acabe siendo, al menos esa fue mi sensación, algo tan entretenido, que me sorprendió y además durante un rato me libré del calorazo que nos está cayendo por estos lares. Sólo al "pagafantas" se le ocurre veranear en Zaragoza...

Y casi no puedo creerme lo de este verano, exposición de Jorge Oteiza en el Palacio de Sástago. Esta semanita aprovechando que tengo "okupas" en casa, me dejaré caer una tarde para verla con calma y seguro que repito pq durará hasta el 20 de septiembre.

No se quien será el responsable pero gracias, es todo un lujo para mi, en este veranito de poca movilidad ver a mi favorito en mi ciudad.

WOODSTOCK

Hace 40 años, del 15 al 18 de agosto se celebró en Bethel Woods, al sur de Nueva York el mítico festival de Woodstock.

Todo un éxito, buena música, marihuana, buen ambiente, buena gente, paz y amor libre, pero fue casi improvisado, en principio iba a ser un pequeño festival y al final se convirtió en multitudinario, se colapsaron las carreteras de acceso por la afluencia masiva.

Este año se pretendía celebrar el 40 aniversario y acabo de leer que se ha cancelado, otra vez le echan la culpa a la crisis, no se han encontrado patrocinadores que aporten entre 8 y 10 millones de dolares que cuesta su organización.

Me parece que algo no me cuadra. Por culpa del "puto capitalismo" no se puede celebrar el festival?

Otro argumento es que ya no existen los principios que inspiraron Woodstock, y eso tampoco me lo creo, estamos aburguesados en general y anestesiados por el consumismo, pero sigue habiendo gente que cree en los mismos principios, aunque me temo que ahora todo está convertido en negocio y todo lo que no da importantes beneficios no existe.

Nosotros aun tenemos Pirineos Sur!!! aunque ya sea complicada la acampada libre a la orilla del pantano, no despertemos con aquellas maravillosas vistas y fuera imposible encontrar a la cocinera de las trufas con sorpresa, que ricas y que risa, sigue habiendo buen ambiente y buena gente.

Pues eso, que viva Woodstock y Pirineos Sur y toda la gente que cree en la PAZ Y EL AMOR, (libre, o no, eso ya, a elección de cada cual).

CRISIS DE LOS CASI CUARENTA...?

Nací el mismo día que Obama y Zapatero, pero diez años más tarde, y si, hace una semana cumplí 39; desde hace un tiempo me siento tan rara, será que la crisis de los cuarenta despliega su influjo...?

Siempre pensé que esto era una milonga, tal vez incluso ahora lo sigo pensando en el fondo, pero es verdad que no es normal en mi, sentirme así durante tanto tiempo, mis bajones duran como mucho 48 horas, a veces son fruto del momento hormonal femenino, otras de la luna lunera y otras incluso de la unión de las dos, o de la visita de mis "encantadores" padres, que consiguen desequilibrarme. Sin embargo esta vez es como si estuviera cuestionándolo todo.

Soy consciente de que no puedo quejarme, he tenido y tengo, una vida estupenda, soy feliz el 99% de mi tiempo, estudié lo que me gusta y trabajo en ello, tengo a mi alrededor a la gente que quiero y me siento altamente correspondida, he logrado conocerme bastante y hasta aceptarme, nunca me he visto obligada a hacer algo que no quisiera hacer, como siempre hay varias opciones he tomado la otra, aceptando las consecuencias.

Estoy segura de que no es algo biológico como en la adolescencia, pero se trata de una especie de sensación de pérdida de tiempo o de que ya no tengo toda la vida por delante pq la mitad, en el mejor de los casos, está consumida. Como puedo ser tan negativa, no me reconozco!!!

Soy consciente de que me estoy centrando en lo imposible, cuando tengo infinitos posibles a mi alcance, pero estos días me despierto en mitad de la noche con una sensación de angustia y me cuesta conectar de nuevo con mi ser.

Es una especie de desilusión conmigo misma y con el mundo, yo que era la eterna adolescente, esa que seguía viviendo sin miedo a no echar raíces, un eterno espíritu libre, con multitud de proyectos en marcha, una vida que giraba constantemente, como un tiovivo...

No me arrepiento de nada, espero acabar pronto con esto, dejar de juzgar, encontrar un nuevo enfoque y si madurar es dejar de decir blanco donde ayer decía negro, creo que no me va a gustar nada, pero prometo aprender a vivir con ello, aunque me cueste todo este año. Eso si dentro de un año, menos una semana, voy a celebrar por todo lo alto que he cumplido cuarenta años estupendos y que todo ha merecido la pena.